SOSTUVO QUE NUNCA SUPO QUE SU ACOMPAÑANTE, CUYO NOMBRE DIJO NO RECORDAR,
PERTENECÍA A LOS SERVICIOS DE SEGURIDAD DEL PRESIDENTE DE EU
Bogotá
.- La prostituta colombiana Dania Londoño, centro del escándalo protagonizado
por agentes del servicio secreto de EE.UU. en Cartagena durante la VI Cumbre de
las Américas, dejó hoy al desnudo a los guardaespaldas del presidente
estadounidense, Barack Obama, a los que tildó de "tontos".
"Son unos tontos", dijo la mujer en una larga entrevista con la emisora
bogotana de La W Radio, que logró el primer testimonio de Londoño sobre su
experiencia con uno de los agentes del servicio secreto de Obama.
En total 12 agentes estadounidenses que se encontraban como avanzada en
Cartagena antes de la llegada de Obama a la ciudad el 13 de abril pasado, están
implicados en el escándalo y al menos nueve de ellos han sido sancionados por
contratar prostitutas, según el diario The Washington Post.
Londoño, de 25 años y madre de un niño, afirmó que pasó toda una madrugada
con uno de esos agentes, con el que aceptó tener relaciones sexuales a cambio de
800 dólares.
La mujer sostuvo que nunca supo que su acompañante, cuyo nombre dijo no
recordar, pertenecía a los servicios de seguridad de Obama.
"El hombre durmió toda la noche", aseguró Londoño, quien dijo que en el caso
de haber sabido que era del servicio de seguridad de Obama, "le hubiese hecho
mil preguntas".
La prostituta contó que lo conoció en un club nocturno en el que ella
departía con su representante y otra compañera de oficio, y que ni el
estadounidense ni sus compañeros en ningún momento mostraron placas o se
identificaron como miembros de los servicios secretos.
"Eran como cualquier otro gringo, de buen físico", agregó Londoño, quien
comentó que tras el escándalo pasó unos días en Dubai para huir del asedio de la
prensa.
La mujer recordó que estos extranjeros "estaban excesivamente borrachos,
pidiendo licor (...), pasándola rico", pero dijo que nunca escuchó que
preguntaran por droga.
"Solamente tomaban alcohol y bailaban", declaró la prostituta, al recordar
que el hombre con el que pasó aquella noche bailaba de manera desordenada y
buscaba impresionar a las mujeres del recinto.
Londoño recordó que este hombre le preguntó por "sexo" y que ella le
respondió que lo aceptaba, pero a cambio de un "regalito" de 800 dólares, a lo
que él accedió.
La mujer dijo que él la llevó al Hotel Caribe, donde estaba alojado junto
otros miembros de los servicios de seguridad estadounidense, y que estuvo allí
hasta las primeras horas del día, cuando recibió una llamada de la recepción en
la que se le pidió que abandonara la habitación.
"Lo desperté y le pedí el dinero", agregó, y apuntó que el agente la insultó
y solo le reconoció 50.000 pesos (poco más de 28 dólares), por lo que ella
acudió al cuarto de otro agente y luego buscó la intervención de la policía
cartagenera.
Entre otros agentes reunieron 250 dólares, que fue la suma con la que ella
salió del hotel tras casi cuatro horas de escándalo.
La prostituta sostuvo que el agente debió haberle pagado los 800 dólares
convenidos por cuanto le prestó sus servicios como dama de compañía.
"Sí pasó, así que con mucha más razón él tenía que pagar mi dinero", apuntó
la prostituta, que lleva una doble vida, según reconoció, pues es esteticista y
trabaja como asistente en congresos en Cartagena, el primer destino turístico de
Colombia, cuando no se dedica a la prostitución.
El escándalo saco a la luz su doble vida, incluso para su familia, y según
dice ahora no sería capaz de rehacer su vida en Colombia y que su vida está "por
el piso" (por el suelo).
La entrevista fue realizada en Madrid y a preguntas de uno de los
entrevistadores Londoño reconoció que se guarda algo en reserva sobre lo
sucedido en abril en Cartagena, porque tiene ofertas para contar su historia a
cambio de dinero. Tras la polémica, Dania dice que decidió salirse de la prostitución. "Esto me
dejó curada. No lo pienso volver a hacer. Esto murió en mi vida",
aseguró. (EFE)
No hay comentarios:
Publicar un comentario