sábado, 1 de enero de 2011

Muere joven enfrentó vida en silla ruedas

CACIQUE, Monción. Murió la joven Yisel del Carmen Arias Vargas, de 28 años, quien postrada en silla de ruedas y con pérdida de la visión, desafió la implacable enfermedad incurable y degenerativa conocida como “esclerosis múltiple”, tras graduarse Summa Cum Laudes en Educación Mención Filosofía y Letras en el Centro Universitario Regional del Noroeste de la Universidad Autónoma de Santo Domingo con sede en Mao. El cura párroco de Cacique, Monción, Ricardo Santos, manifestó que la comunidad ha perdido a un ser humano extraordinario que aceptó con amor su enfermedad y que demostró su gran espíritu de servicio, pues a pesar de sus litaciones tenía una sala de tarea en su casa, además se desempeñaba como bibliotecaria del centro educativo más importante de la comunidad. Era hija de Amado Bienvenido Arias Peralta y Aida Vargas, y hermana de Yina Altagracia, Yinet e Ingrid Isabel. Yisel fue autora de un libro de poemas titulado “Yo, íntima en 30 poemas elegíacos”, puesto en circulación en diciembre del 2008. Además recibió el premio “Esta Noche” que distingue en Santiago Rodríguez a jóvenes sobresalientes. Su dimensión humana le permitió sobreponerse a la pobreza y hasta demostrar ser más fuerte que la muerte. Desde hace 10 años padecía de esclerosis múltiple progresiva, afección que le ocasionó la pérdida de la visión y dificultad para caminar. Pero se valió de un andador y una silla de ruedas para enfrentar las dificultades que la vida le había impuesto, a fin de viajar a Mao todos los días para asistir al centro universitario regional de la UASD. A los 19 años empezó su carrera universitaria, pero al completar su primer semestre descubrió que tenía la esclerosis múltiple progresiva, la cual no había sido obstáculo alguno para luchar por obtener mejores condiciones de vida y lograr sus sueños. Planeaba iniciar una maestría en Lingüística Aplicada. Para sus compañeros de carrera, profesores y empleados el esfuerzo realizado por Yisel constituía un vivo ejemplo digno de emular, debido a que con todas las deficiencias de salud siempre obtenía excelentes calificaciones en todas las asignaturas. Además, se preguntaban de dónde sacaba fuerza para ayudar con las tareas a los compañeros que se le acercaban para pedir su ayuda. Su profesor Rafael Paulino dice: “sólo el deseo de demostrarse a sí misma que es capaz de vencer los óbices encontrados en su vida y el deseo de superación, más el apoyo de sus padres, hermanas, familiares, amigos y personas de su comunidad eran las posibles explicaciones que encontramos a la tenacidad mostrada por ella en el transcurso de su carrera y de su vida”. A juicio del profesor universitario, esta valerosa joven terminó un trecho del camino a la superación y el éxito personal. A juicio de Paulino, la consecución de esa nueva meta, necesitaba que su tratamiento no fuera interrumpido, pues, el mismo debe durar como mínimo dos años continuos. “Las inyecciones que usaba se llaman Avonex y en la actualidad, es la única medicina que podía controlar la enfermedad, debido a que la esclerosis múltiple no tiene cura y de no utilizar estas inyecciones, la enfermedad acabaría avanzando y terminaría por atrofiar otros órganos, hasta el punto de provocarle un accidente cerebro vascular y dejarla en estado neuro-vegetativo, según explicaciones de su médico, Ivan Mercedes Mateo.

Tomado del Periodico El Nacional
31/12/10