Katheryn Luna
No es lo usual. La
violencia tiene ahora tintes más dramáticos y casi inimaginables: hombres que
asesinan a sus parejas o ex parejas junto a niños inocentes y madres que se
suicidan y con ellas arrastran a sus hijos, ¿qué está pasando? Los
suicidios de mujeres y hombres con el factor agregado del infanticidio que han
estado ocurriendo en las últimas semanas es una modalidad de autoagresión por la
cultura de violencia que se ha formado en el país. El planteamiento es
del presidente de la Sociedad Dominicana de Psiquiatría, José Miguel Gómez,
quien calificó de preocupante que estos suicidios con métodos más agresivos
estén también involucrando a los hijos. El profesional de la conducta
dijo a listindiario.com que estos hechos ocurren cuando las personas padecen de
trastornos emocionales, depresión, síndrome de la desesperanza aprendida,
niveles de frustración muy altos o poca capacidad de tolerancia a la
frustración. Explicó que muchas de estas mujeres viven en pobreza
extrema, en exclusión social donde su vida gira a nivel de un hombre que las
mantiene y ese estado de dependencia emocional, económica y social las lleva a
que si el hombre se va con otra, las maltrata y abandona, entren en etapas de
frustración donde siente que su vida no será igual ni la de sus
hijos. Explica que, entonces, estas mujeres se van descompensando en
términos psicológicos y comienzan a plantearse unos pensamientos infravalorados,
negativos, con abatimientos, considerando que la vida no vale la pena y al final
recurren al suicidio. Señala que también con los hombres se registran casos de
extrema violencia. “Es una pena que se estén viendo suicidios con mucha
agresión y sadismo. Las últimas muertes por homicidios matan a la esposa, hijos
y luego se matan ellos, una cultura de mucha violencia”, apuntó. Dijo que
el hecho de que las mujeres se suiciden de manera agresiva, como el
ahorcamiento, es un nuevo giro, que habla de una cultura de violencia y nueva
modalidad de autoagresión, lo que significa, según el especialista, que los
dominicanos en el comportamiento y la mentalidad no se están preparando para
mediar conflictos, para tener una cultura de paz, ni para lidiar en una
situación de riesgos, sino, que se están preparando a resolver por medio de la
agresión los problemas de parejas. En cuanto a la violencia de género,
Gómez dijo que es preocupante que más de 80 mujeres en menos de seis meses han
sido victimas de esta violencia. Dijo que estos casos muestran que los
dominicanos siguen adoleciendo la parte de la cultura del machista, el sentido
de pertenencia y ver en las relaciones de pareja como propiedad privada del
hombre, “entendemos y creemos que podemos quitarle la vida a la mujer cuando
plantea algún tipo de desamor o lo quiere abandonar”, expresó Sostuvo que
el “macho” dominicano no ha evolucionado en términos emocionales, tampoco en
términos de inteligencia emocional y social porque no está desarrollando las
habilidades para tolerar diferencias, para manejar disenso y saber controlar sus
emociones para cuando hay divorcios o separación.
PERFIL
PERFIL
La mayoría de persona que tienen indicadores de riesgos de suicidios son personas que han padecido anteriormente de depresión, ideas o intentos anteriores, historia de abandono, de frustración, situaciones de desesperanza, pensamientos infravalorados, los desempleados, personas que no han logrado tener acceso al desarrollo social, que han caído en abusos de sustancias, o si poseen una historia familiar de trastorno mental, suicidios de algún familiar cercano o trastorno emocional. Dijo que los niños que han vivido estas experiencias pueden sufrir de depresión, problemas para socializar, sufrir pesadillas, inseguridad, baja autoestima, agresividad o, a medida de haber pasado por esta situación y saber que algún familiar cercano se suicidó, puede aprender a que las personas cuando tienen algún tipo de problema recurren al suicidio y puede cometer el mismo hecho en el futuro. Sostuvo que estos niños deben de ser sometidos a una evaluación y a un seguimiento psiquiátrico o psicológico, porque pueden quedar con traumas, estrés postraumático y lesiones emocionales durante toda su vida. Dijo que son más de 300 niños huérfanos de padre y madre producto a la violencia de género, y que muchos de estos no reciben asistencia. Llamó a los familiares de niños que hayan pasado por esta situación, buscar ayuda de un especialista.
Fuente : Santiago30caballeros.com