Internas Rafey-Mujeres |
Ricardo Santana
Santiago.-La procuradora de la Corte de Apelación de Santiago, Bielka Calderón, pidió
ayer paciencia a las reclusas del Centro de Corrección y Rehabilitación (Rafey
Mujeres) de esta provincia, quienes insistentemente reclaman que se les permitan
tener relaciones sexuales con sus cónyuges y parejas, tal como ocurre con los
hombres privados de su libertad. A este respecto, la máxima representante del ministerio público en Santiago
dijo que la situación de las reclusas de Rafey que exigen sexo no está en sus
manos, porque todo depende del movimiento feminista.
Subrayó que las feminnistas entienden que si las autoridades obligan a las
internas a usar anticonceptivos y u otros métodos que podrían prevenir
embarazos, estarían invadiendo su privacidad y quitándoles a la vez sus derechos
a la libertad.
“El problema no está en nosotros, si tuviera en nuestras manos ese asunto con
mucho gusto complaceríamos a esas internas, pero no podemos chocar con otras
instituciones”, indicó.
No obstante, Calderón informó que se trabaja para ver como coordinan esa
situación con los movimientos feministas para que las reclusas de Rafey Mujeres
también puedan tener relaciones sexuales, tal como ocurre con los hombres.
La procuradora de la Corte de Apelación de Santiago dijo que en realidad las
internas tienen razón, porque en ese aspecto se les está discriminando. Se recuerda que en el viejo sistema penitenciario, las reclusas se
alborotaron porque un oficial de la Policía que custodiaba la antigua celda de
las mujeres privadas de su libertad en Rafey, despojó de un “consolador” a una
presa que lo alquilaba a las demás a 15 y 25 pesos por cinco y 12
minutos.