viernes, 1 de enero de 2010

ERCILIA PEPIN RECONOCIO HEROES DE LA BARRANQUINTA




































Meritoria educadora dominicana que ha recibido el homenaje permanente de la posteridad

Tres calles de Santo Domingo llevan el nombre de Ercilia Pepín: en Cuesta Brava, en Los Minas Sur y en Los Trinitarios. "No lo entiendo", expresa Valentina Peguero, y comenta: "Creo que debería ser una y darle dos a otras mujeres que hayan hecho trabajos de importancia a favor de la sociedad dominicana. No creo que esté mal que se le hayan dado tres, pero debería ser una, para hacer justicia. Pienso que si se le preguntara a ella, ella diría lo mismo".

Es uno de los pocos personajes meritorios de la historia dominicana con los cuales no ha sido ingrata la posteridad. Más de una calle la recuerda en todos los pueblos de la República. Tres vías de Santo Domingo, así como infinidad de escuelas, llevan su nombre. Las biografías sobre su vida de maestra, patriota, bienhechora, revolucionaria, feminista, abundan tanto como bustos con su inconfundible rostro dulce y manso contrastante con la reciedumbre con que enfrentó a los yanquis y desató la furia del dictador Trujillo.

Durante años, la faceta más destacada de Ercilia Pepín fue la de la educadora consagrada. Ha sido después de eliminada la tiranía cuando con mayor énfasis sobresale el carácter nacionalista de esta mujer excepcional que mostró ante el mundo tan patéticas pruebas de valentía.

Es la figura femenina nativa admirada por la historiadora Valentina Peguero, quien ahora trabaja en la preparación del libro "Mujeres pioneras dominicanas". "El nombre de Ercilia Pepín es para mí relevante porque fue la primera mujer que organizó la resistencia contra la intervención norteamericana de 1916, fue una maestra formada y esa capacidad magisterial la usó no solamente dentro del aula sino también fuera. Una de sus labores fue la de enseñar a otras mujeres a unificar ideas de lucha antiintervencionista", declara.

Resalta, en otro orden, que "ella creó la Fundación de la Acción Feminista en Santiago e hizo una labor tremenda, porque Ercilia Pepín fue una mujer de una posición vertical, firme, y esas mujeres se lanzaron a luchar, hay que colocarlas en el contexto de ese siglo, ese comienzo en que se atrevieron a desafiar las bayonetas con las palabras".

Se refiere al libro "Feminismo", escrito por la insigne dama, "en el que ella habla de la historia de la lucha, de lo que es y debe ser la mujer, hacia donde se debe encaminar. Ercilia, agrega, tuvo una mentalidad que iba más allá de lo nacional, y en la lucha de Sandino, en Nicaragua, se une, reconoce esa lucha y prepara una bandera bordada y se la envía a Sandino significándole la unión del pueblo dominicano con el de Nicaragua contra la intromisión imperialista. Tenía lo que hoy llaman una visión global, que iba mucho más allá de los linderos nacionales, y eso hay que reconocerlo".

Por otro lado, señala, "Ercilia tenía la capacidad de hablar, y de hablar bien, de convencer. Tomó una decisión que pocos toman: la de rechazar, en ese tiempo, una invitación de Estados Unidos para asistir a un congreso de mujeres. "¿Cómo voy a ir a hablar de mi país al país que tiene opreso a mi propio país?", dice que alegó en su rechazo.

La autora de "Visión Histórica de la República Dominicana", escrito con el también historiador Danilo de los Santos, confiesa que Ercilia Pepín es la dominicana del siglo pasado que más admira "por su firmeza, porque era revolucionaria y antiintervencionista, porque era una mujer de principios". La maestra, manifiesta, "fue muy importante, pero cuando quieres destacar algo piensas que hay muy buenas maestras, si se enumeran, la lista es enorme, pero ella salió de esos linderos de la educación y traspasó otros aspectos, es una mujer que tiene múltiples facetas".

Contra Trujillo

Durante el trujillato, "Ercilia Pepín fue cancelada de su puesto de directora de la escuela México, en represalia por haber izado a media asta la Bandera, en protesta por el asesinato del profesor Andrés Perozo". Ya hacía pocos años que la ilustre educadora padecía una intensa infección renal por lo que los médicos la evaluaron, "planteando la necesidad de una cirugía delicada y muy riesgosa", según apunta el doctor Santiago Castro en "Enfermedades de Dominicanos Célebres", relatando que el tirano, "para congraciarse con la ilustre enferma y la comunidad de Santiago dispuso que el doctor Luis E. Aybar y una ambulancia militar se trasladaran a esa ciudad para evaluar la paciente", que luego sería trasladada a una clínica de la capital y posteriormente a Baltimore porque en el país "no existían las condiciones biotecnológicas pare realizar ese tipo de intervenciones".

Por eso, cuando fue suspendida del cargo por el gesto solidario frente al crimen contra Perozo, Ercilia Pepín declaró públicamente que sentía agradecimiento con Trujillo por haberla enviado al Hospital Johns Hopkins, pero que era opuesta a la política partidaria en las escuelas, agrega Castro.

Alejandro Paulino, biógrafo de la notable feminista y patriota, anotó que "la vida intensa que vivió Ercilia Pepín, impartiendo hasta doce horas de clases diarias, visitando enfermos en los hospitales y presos en las cárceles, fue destruyendo paulatinamente su salud". Ercilia, que había nacido el 7 de diciembre de 1884, falleció en su ciudad natal el 14 de junio de 1939, a los 55 años de edad.

Dice en una de las reseñas de su fallecimiento que "conociendo su próximo fin había dado todas las disposiciones necesarias para partir hacia donde no se vuelve más, entre ellas la construcción de un mausoleo en el Cementerio Municipal, que quedó terminado días antes de su muerte".

Maestra

Ercilia Pepín se entregó al magisterio a los 14 años de edad y ya a los 15 fue nombrada directora de la Escuela de Niñas de Nibaje. Debió proseguir sus estudios en la noche, teniendo como profesores a Ricardo Ramírez y Salvador Cucurrullo. Con este último recibió clases de Geometría Descriptiva, Cálculo Diferencial, Geometría Analítica, Trigonometría Rectilínea y Esférica, Cálculo Integral, entre otras materias.

Introdujo la pedagogía nacionalista hostosiana, incorporó asignaturas modernas en la escuela de la época, estimuló la composición de himnos escolares, por su esfuerzo se adoptó el uniforme en las escuelas y el tratamiento de "Usted y profesora", anota Julio Jaime Julia en su libro "Haz de Luces". En 1908 Ercilia Pepín fue designada profesora de Ciencias Matemáticas, Físicas y Naturales del Colegio Superior de Señoritas, cubriendo ella sola las materias asignadas a cuatro maestros. Durante siete años, entre 1909 y 1916, impartió clases particulares y preparó, sola, varios grupos de alumnas hasta graduarlas de Maestras Normales y Bachilleres en Ciencias y Letras.

Con sus ingresos propios dotó al Colegio de Señoritas de una valiosa colección zoológica de la fauna nacional, otra botánica de la flora dominicana, un gabinete de Física, un laboratorio de Química y un microscopio. Cuando le asignaron el cargo de directora del Colegio de Señoritas, agregó cursos teóricos a la secundaria y aunque pagaba algunos maestros con su salario, logró que reconocidos pedagogos como Salvador Cucurrullo, Joaquín Balaguer, Luciano Díaz, Jafet Hernández, César Perozo y Lorenzo Pellerano impartieran docencia sin recibir remuneración. "El local del Colegio de Señoritas, transformado en Escuela México por don Enrique Deschamps, e inaugurado en mayo de 1929, fue posible gracias a los tesoneros esfuerzos de Ercilia", consigna Julia. A través de una activa campaña de prensa, logró infundir a los dominicanos, en otro orden, el respeto por el Himno Nacional y la Bandera. Al instalarse la Asociación de Maestros de Santiago, el 16 de enero de 1932, Ercilia Pepín fue escogida a unanimidad Presidenta Honoraria.

Nacionalista y filántropo

En una de las tantas crónicas publicadas tras su muerte se destaca que Ercilia Pepín "Escribía con soltura, y su palabra oral y escrita electrizaba a sus oyentes. Hablaba con el corazón a flor de labios". Esa condición la puso de manifiesto en las conferencias pronunciadas contra la ocupación yanqui, mereciendo "repetidos aplausos de la concurrencia" congregada en Santiago, La Vega, Santo Domingo, Puerto Plata, San Juan de la Maguana, Puerto Rico, y en la Legación Dominicana en París, Francia.

Recogió firmas de protestas que entregó al intruso, organizó veladas patrióticas, propició la conmemoración de efemérides patrias y, evacuadas las tropas, fue la primera en reconocer "con imponente lucimiento" a los héroes y mártires de La Barranquita de Guayacanes que defendieron la soberanía. Mientras se empeñaba en estas campañas, iba a las cárceles a llevar alimento y a predicar el Evangelio a los reclusos, y visitaba a los enfermos.

En 1921 el Gobierno Militar de Ocupación la designó Delegada Dominicana al Congreso Panamericano de Feminismo que se celebró en Baltimore. Ercilia Pepín declinó la invitación "porque no podía ir a representar mi país al extranjero llevando credenciales suscritas por los jefes de las fuerzas invasoras de mi Patria", escribió. Dio lucidez a celebraciones como los días de la Raza, el Árbol, las Madres, e hizo costumbre acudir al cementerio con profesores y alumnos a depositar flores en las tumbas de todos los maestros fallecidos en Santiago.


Fuente: Ángela Peña/www.hoy.com.do
11 marzo 2007

CLUBES DE ANIMACION A LA LECTURA EN MAO, VALVERDE












La Secretaría de Estado de Cultura a través de la Dirección General del Libro y la Lectura que dirige la Lic. Eleanor Grimaldi Silié, dejó formalmente constituidos en Mao, Valverde, quince Clubes de Animación a la Lectura, catorce (14) funcionarán como una red y desarrollarán su labor en diferentes sectores de la misma, y uno (1) realizará sus encuentros en el Centro de Corrección y Rehabilitación de la mencionada provincia. Los talleres contaron con la participaron de 60 personas. El trabajo técnico estuvo a cargo de la escritora y gestora cultural Raysa White, de la Dirección del Libro y la Lectura, quien impartió los seminarios de capacitación. En los primeros, quedaron designados catorce coordinadores que fungirán también como orientadores, los cuales junto a los integrantes, darán seguimiento al programa nacional. Se eligió como monitor o responsable general al poeta Randolfo Ariostto quien –además de atender el Club del Centro de Corrección y Rehabilitación- también, a nivel provincial, se reunirá con los responsables de Clubes y apoyará al Director Municipal en la continuidad del trabajo. Los clubes quedan bajo la tutela de la Dirección Provincial de Cultura de Valverde, dirigido por Robinson Pineda. La fundación de estos espacios forma parte del extenso programa que por instrucciones del Lic. José Rafael Lantigua realiza la Dirección General del Libro y la Lectura en la República Dominicana.

CLUBES DE ANIMACIÓN DE LA LECTURA

1) Nombre del Club: Pedro Mir
Responsable: Expedito González
Correo: expedito_58@hotmail.com
Teléf: 809-572-5818 / 809-790-9929
Lugar de reunión: Liceo profesor Juan de la P. Reyes.

2) Nombre del Club: Creciendo
Responsable: Reyna Abreu
Correo: reynaisabelabreu@hotmail.com
Teléf: 809-585-8015
Lugar de reunión: Escuela El buen samaritano.

3) Nombre del Club: El Universo
Responsable: Expedito González
Correo: reyescarmen63@gmail.com
Teléf: 809-572-2635 /809-919-7222 y la oficina: 809-572-3460
Lugar de reunión: UTESA.

4) Nombre del Club: La lectura es conocimiento
Responsable: Anabel Reyes
Correo: mailto:expedito_58@hotmail.com
Teléf: 809-585-7023 / 809-249-2125
Lugar de reunión: Laguna Salada.

5) Nombre del Club: Construyendo el futuro
Responsable: Anatalia de León
Correo:
Teléf: 809-585-8004 / 809-299-0042
Lugar de reunión: Liceo Matías Ramón Mella.

6) Nombre del Club: Amante a la lectura

Responsable: María Altagracia Sandoval Marte
Teléf: 829-699-0424
Lugar de reunión: Damajagua el Palo.

7) Nombre del Club: Gabriela Mistral
Responsable: Flavio Aragonez
Teléf: 809-585-7298
Lugar de reunión: Escuela primaria de Jaibón.

8) Nombre del Club: Damajagua
Responsable: Félix Antonio Puello Ogando
Teléf: 809-601-2683
Lugar de reunión: Liceo Francisco del Rosario Sánchez (Damajagua/Esperanza).

9) Nombre del Club: Alberto Mangual
Responsable: Carlos reyes
Correo: carlosaudade@yahoo.com
Teléf: 829-972-5668
Lugar de reunión: Liceo profesor Juan de la P. Reyes.

10) Nombre del Club: El gallinero
Responsable: Luis Ramón Lara Germoso y Silvia Santos
Correo: elgallo00105@hotmail.com
Lugar de reunión: Colegio Ronda infantil / Esperanza.

11) Nombre del Club: Arco iris de lectura
Responsable: Lourdes Altagracia González y María A. Muñoz
Correo: albania_lacaya@hotmail.com
Teléf: 829-357-0334 / 809-272-6359
Lugar de reunión: La Caya.

12) Nombre del Club: Aprendices del conocimiento
Responsable: Máxima Fernández y Viviana Ortiz
Correo: mmfernandez@sec.gov.do / distrito0902esperanza@gmail.com
Teléf: 809-585-8060 / 809-585-9234 / 809-783-0653
Lugar de reunión: Técnicos docentes distritales 0902.

13) Nombre del Club: Abejas en vuelo
Responsable: Lic. Hilda María Torreslez
Correo: distrito0902esperanza@gmail.com
Teléf: 809-694-5448
Lugar de reunión: La Esperanza.

14) Nombre del Club: El vuelo de las mariposas
Responsable: Lic. María Estela Martínez
Correo: distrito0902esperanza@gmail.com
Teléf: 809-753-5361
Lugar de reunión: La Esperanza.

15) Nombre del Club: C.C.R. Mao
Responsable: Randolfo Ariostto
Correo: poetaariostto@gmail.com
Teléf: 809-253-1057
Lugar de reunión: Liceo profesor Juan de la P. Reyes.


16) Club de Lectores: Centro de Corrección y Rehabilitación de Mao
Director del Centro: Francisco. A. Valera P.
Correo: eulises@hotmail.com
Teléf: 809-480-8657.
Responsable el Club: Randolfo Ariostto

Fuente : http://direcciongeneraldellibro.blogspot.com/2009/08/clubes-de-animacion-la-lectura-en-mao.html

Secretaria de Estado de Cultura

MITOLOGIA Y NOSTALGIA EN VIEJA HACIENDA BOGAERT DE MAO
































MAO, Valverde.-Una vieja casona de mampostería, construida el 31 de mayo de 1941 por el maestro de obra, Rafael Cepeda, se resiste a desplomarse a pesar de la inclemencia del tiempo, como si no quisiera borrar el vestigio de una prestante familia de origen Belga, que se radicó en este municipio y levantó la hacienda Bogaert.

La hacienda de la familia Bogaert era una especie de un emblemático ícono que solían visitar y disfrutar los visitantes, por sus exuberantes jardines y por la variedad de aves y animales, encabezado por el cortejo del colorido plumajes de sus pajuiles, pavos reales, gansos, patos pequineses, caballos de pasos finos y otras, dando la impresión de un “oasis en el desierto”, ante la agreste tierra de la Línea Noroeste, distante a 210 kilómetro de la ciudad capital.

Sin embargo, hoy día todavía en nuestra ciudad perduran los emblemáticos símbolos del llamado “Santos Bogaert”, instalado a la entrada del municipio cabecera, así como el canal Monsieur Bogaert, quien además de atravesar el poblado, irrigas con sus aguas los sembradíos de arroz en la zona. De igual forma, el hospital público “Luis L. Bogaert”, y el “Sapo Bogaert”, batracio que introdujo desde SURINAM (Guayana Holandesa) para enfrentar los insectos que diezmaban los arrozales en la zona.

La vieja amargaza de metal, vigas de concretos, maderas y zinc, hoy sirve de albergue para la crianza de palomas, cerdos y otras especies de animales, además, de estar habitada por Jacobo Núñez, quien lleva 34 años atendiendo la vieja mansión de la Hacienda Bogaert. Llegó allí en 1975 con apenas 17 años de edad como jardinero. Todavía hoy día habita el lugar con su esposa y dos nietos menores de edad, entre seis y siete años.

La venerada familia Bogaert es reverenciada en la ciudad de Mao, tras definirlos como los padres del municipio, provincia Valverde, al considerar que fueron los que engrandecieron la zona y en cuya hacienda trabajaban miles y miles de personas, incluyendo al otrora líder político José Francisco Peña Gómez.

Debajo de la casona todavía quedan los vestigios de un salón de bailes, el cual era frecuentado por Rafael Leonida Trujillo Molina, mientras en su interior hay enganchado en una de las paredes de madera una pintura de la bailarina Cinthia Bogaert, realizada por el pintor maeño, Hendrick, dedicada a Don Luis Bogaert. Asimismo, al lado de la puerta principal perduran las iniciales LBR, es decir, familia Luis Bogaert Román).

La llegada del ingeniero Luis L. Bogaert (Monsieur Bogaert) y su familia transformó la agricultura y ganadería, tras construir el primer canal de riego de la zona, ante la falta de agua para irrigar tierras antes improductivas. Fue inaugurado en 1918 en el periodo de la influenza (epidemia).

En 1919, el belga Monsieur Bogaert y su hijo Alberto Bogaert, por primera vez siembran en Mao diez tareas de arroz, en la comunidad rural de El Palmar, constituyéndose en el pionero en desarrollar el sistema de riego en el país, y el desarrollo de la agricultura, en especial en sus propiedades de La Loma en La Búcara de Jacagua, Santiago y en la ciudad de Mao, aplicado científicamente a la siembra de arroz.

Sin embargo, el ingeniero Bogaert, tras percatarse que las plantaciones de arroz estaban siendo mermadas por una plaga de insectos, procedió a viajar a SURINAM (Guayana Holandesa), de donde introdujo al país una pareja de sapitos de una especie insectívora, la cual depósito en un criadero del canal, cuyo batracios se reprodujeron con rapidez y fueron transportados en camiones a todas las zonas arroceras. Hoy día los sapos de la región se conocen con el nombre de “Sapo Bogaert”.

Los primeros huéspedes

Los viejos fundadores de la Hacienda fueron Don Alberto Manuel Bogaert (1896-1958),) y doña Eugenia (Gena) Román de Bogaert (fallecida en 1951), luego continuo administrando Luis L. Bogaert (fallecido en 1992), cuyo nombre de este ultimo, lleva el hospital público de la ciudad de Mao.

Entre los últimos descendientes de la familia que habitaron el lugar figuran Álvarez Bogaert. Sin embargo, la actual dueña de la vieja casona es doña Cinthia Bogaert, residente en la capital, mientras los demás viven en Santiago de los Caballeros. Doña Finetta Bogaert, reside en Santo Domingo, pero tiene una casa veraniega en Jarabacoa.

“Cuando yo vine aquí (a la Hacienda Bogaert), era un muchacho, todavía sin cédula, y gracias a Dios me he hecho hombre, por la confianza que la familia Bogaert siempre nos ha tenido”, exclamó Jacobo Núñez.

“Esta era una cosa maravillosa por su gran variedad y especies de aves y animales, como pajuiles, gansos, patos pequineses, caballerizas y otros.

Jacobo Núñez, cuenta que su patrón un día del año 1981 le dijo que vendiera por su antigüedad un columpio instalado debajo de la casona, en cuya área el fenecido dirigente político, José Francisco Peña Gómez, siendo un adolescente y en su calidad de ser uno de los mejores estudiantes, impartía docencia a los niños pobres, por cuya labor la familia Bogaert le daban algo para su subsistencia.

HISTORIA INEDITA DE TRUJILLO

Jacobo Núñez, revela que según le contaba su patrón, Luis Alberto Bogaert, que el generalísimo y benefactor de la Patria Nueva, como solía llamársele al dictador Rafael Trujillo Molina, en una de sus visitas a la Hacienda, se quedó atrapado en el cuarto de baño de la alcoba de Don Alberto Bogaert y doña Gena Román de Bogaert.

Agrega que ante las versiones que en la época circulada de que en Mao atentarían contra Trujillo, sus guardaespaldas, apresuradamente procedieron a desplomar la parte trasera del baño para rescatar al presidente de la República de entonces.

Tronco genealógico familia Bogaert

Libert Louis Bogaert (1866-1935) y Dolores de Jesús Román Grullón (1873-1962), tras su unión matrimonial dieron origen al tronco del árbol que constituye la familia Bogaert Román y sus descendientes, procreando así 14 hijos.

Entre los que figuran: Jeanne Eugenia Bogaert (1893-1987), casó con Ramón A. Delgado Oller. Luis Domingo Bogaert (1894-1895); Federico Carlos Bogaert (1895-1896); Alberto Manuel Bogaert (1896-1958), casó con Eugenia Román; Carlos Bogaert (1898-1898); Elena Margarita Bogaert (1900-1982); Huberto Carlos Bogaert (1901-1962), casó con Dolores Celia Díaz; Eduardo Guillermo Bogaert (1903-1981), casó con Estela del Carmen Álvarez; Eugenia María Bogaert (1904-1980), casó con Arrow Franklyn Herbert; María Dolores Bogaert (1906-1991), casó con Edward P. Crouch; Estefanía Enriqueta Bogaert (1907-1973), casó con Robert G. Smith; Bertha Gertrudis Bogaert (1908), casó con Cornelio Bouma; Miguel Bogaert (1910-1945); Carmen Augusta Bogaert (1912), casó con José de Jesús Álvarez Perelló.

Fuente: http://lasprovinciaspordentro.blogspot.com/
(azcona96@hotmail.com)

EL PROFESOR BOSCH Y EL DESARROLLO DE MAO

















Escrito por: FELUCHO JIMÉNEZ

El gobierno de Juan Bosch del 1963 constituye el referente histórico obligado en términos de democracia, honestidad y absoluto respeto a los derechos humanos.

Nunca en la historia dominicana, ni antes ni después de su presidencia, se ha ejercido el poder de manera tan diáfana y transparente. Juan Bosch salió del poder tan pobre como llegó a este, en términos económicos.

Su visión del desarrollo económico le llevó a plantear la necesidad de una planificación regional, para aprovechar la dotación de los recursos propios de cada región y a sus posibilidades de expansión.

Veamos:

Entendía que en Barahona debía implantarse la industria petroquímica. Allá tienen las minas de sal y de yeso; cultivos de caña y pensó en la instalación de una refinería de petróleo, por cuanto esa ciudad jamás ha sido afectada por un huracán.

Dió instrucciones para que el desarrollo industrial de la capital se implantase en Haina, en virtud de las bondades de su puerto, considerablemente superiores a las del Puerto Santo Domingo.

Tuvo la visión de impulsar el turismo en el Este, incluyendo la isla Saona.

Pensó en el desarrollo de zonas francas industriales en Puerto Plata y Samaná; de hecho inició la de Puerto Plata, con una nueva planta de energía eléctrica y la modernización de su puerto.

Las razones consistían en la cercanía de ambas ciudades a los Estados Unidos.

Dió las instrucciones de lugar para que en Mao, capital de la provincia Valverde, y Cotuí, común cabecera de la provincia de Sánchez Ramírez, se establecieran las bases del desarrollo agroindustrial, para el Noroeste y Nordeste del país.

Fue certero en planificar centros urbanos pequeños en áreas rurales, comenzando por la zonas cañeras. Tendrían casas, parques, mercados, cines, escuelas, acueductos, iglesias y oficinas de administración pública, para que disfrutando de las comodidades de la vida citadina se evitase la emigración del campo a la ciudad.

Y comenzó esos trabajos en Sabana Grande de Boyá y en Villa Altagracia.

Visualizó la necesidad de incrementar la generación de energía eléctrica aprovechando las aguas de los ríos, y así se iniciaron los trabajos de las presas e hidroeléctricas de Taveras y Valdesia.

La primera también daría lugar al sistema de riego de toda la Línea Noroeste y parte de la provincia de Santiago y la última, la de Valdesia, alimentaría el acueducto de Santo Domingo.

En fin, no hay tiempo en esta presentación para exponer todo cuanto pensó Juan Bosch en términos del desarrollo económico planificado del país.

Hay que dejar constancia, sin embargo, de que tenía un concepto claro sobre las obras prioritarias y las que no.

Y en ese sentido, también nos legó el conocimiento de que las improvizaciones en la ejecución de las obras públicas perjudicaba, o podía perjudicar, grandemente al país.

En su gobierno no se dieron contratos grado a grado e, incluso, no se otorgaba más de una obra a ninguna empresa de ingeniería. Hasta en eso dió cátedras de democracia, en el campo económico.

Les agradezco a todos su presencia; a mi querido amigo César Pina por sus palabras de presentación y sobre todo a la vida, que me permitió conocer, tratar y trabajar con el más grande e ilustre de los dominicanos del siglo XX, el profesor Juan Bosch.

Buenas noches.

Fuente : Periodico Hoy

6 de diciembre 2009