martes, 28 de junio de 2011

VIOLENCIA MACHISTA ES MUY ALTA EN AMERICA LATINA

Cuatro de cada diez mujeres sufren violencia machista en Latinoamérica, y casi un 60 por ciento es víctima de maltrato psicológico, según reveló ayer un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) sobre la violencia contra la mujer. Los datos demuestran que la violencia física sufrida por las mujeres va desde golpes simples hasta agresiones severas y un 45% de ellas declara haber recibido amenazas de muerte por parte de sus parejas. En muchos casos, las agresiones se acompañan por una fuerte carga de violencia psicológica y también sexual, hasta el punto que entre el 5% y el 11% de las mujeres dice haber sido víctima de violencia sexual. Los abusadores psicológicos, esconden sus practicas detrás de buenos modales delante de la sociedad, para evitar ser detectados y en la mayoría de los casos se hacen las victimas y niegan sus comportamientos delante de familiares y amigos, acusando a sus parejas de provocar la situación y así tenerlas acorraladas e impotentes de que ellas decidan alejarse de las agresiones y no los abandonen. Los abusadores psicológicos, no reconocen sus problemas haciendo más difícil recibir ayuda, pues nunca aceptan que padecen un trastorno en su personalidad. Muchos de los abusadores psicológicos y físico, proceden de hogares donde vieron un Padre que no respetaba a la madre, donde había alcoholismo, prostitución y sobre todo maltratos de golpes a los hijos. El maltrato psicológico, o violencia emocional, es la agresión más frecuente, según señala el informe, titulado "¡Ni una más! Del dicho al hecho- ¿Cuánto falta por recorrer?". Los insultos, las descalificaciones, humillaciones y burlas son muestras de maltrato psicológico, así como los medios de dominación que utiliza el agresor para controlar el tiempo, la libertad de movimiento y los contactos sociales de la mujer. En algunos países, según cita el texto, el control sobre el uso del dinero por parte de las mujeres, también conocido como violencia económica, puede llegar a afectar a un tercio de las mujeres.El estudio denuncia que existen serias deficiencias en la aplicación de las normas internacionales que buscan proteger a la mujer, así como en la provisión de servicios y en el acceso a la justicia por parte de las víctimas. Además, los responsables del texto señalan que no se han destinado suficientes recursos a la prevención y sanción de todas las formas de violencia contra la mujer, y advierte de la necesidad de convertir la erradicación de la violencia machista en un objetivo central de las agendas públicas. El informe forma parte del lanzamiento de la campaña global "Únete para poner fin a la violencia contra las mujeres”, lanzada por el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.