Washington D.C. — Con su madre al lado, Julissa Reynoso Pantaleón de origen dominicano tomó el juramento para convertirse en la nueva embajadora de EE.UU. ante Uruguay. “Es el mejor ejemplo de nuestra nación de inmigrantes. Ella llegó a los Estados Unidos de muy niña, sin saber hablar, ni escribir el inglés. Y su éxito se debe a su gran esfuerzo y sacrificio”, expresó con singular satisfacción la Secretaria de Estado Hillary Clinton al tomar el juramento de Reynoso, quien se convierte así en la primera dominicana en el cargo de embajadora. La flamante diplomática juramentó al lado de su orgullosa madre, Rosario Pantaleón, quien sostenía la Biblia ante la atenta mirada de casi un centenar de familiares, compañeros de trabajo y amigos, entre quienes destacaba la conocida actriz, Glenn Close, en una de cuyas películas trabajó como extra la nueva embajadora. De reducida figura, Reynoso Pantaleón se emocionó hasta las lágrimas cuando en su discurso reconoció a sus familiares, sus mentores y a su querida ciudad de Nueva York; recibiendo vivas y aplausos de los entusiastas asistentes. Rosario Pantaleón quiso destacar el trabajo por la comunidad y la familia, como el mejor ejemplo de su hija. “Ha sido una dedicación con amor, sobre todas las cosas, trabajo que es necesario continuar”, añadió mientras recibía  felicitaciones en la oficina principal del Departamento de Estado. Reynoso se crió en El Bronx. Llegó a Nueva York de niña y, tras graduarse de Harvard, Cambridge, y Columbia, se convirtió en abogada en el bufete Simpson Thacher y Bartlett. También trabajó para el Departamento de Educación de su ciudad y sirvió como profesora asociada en las facultades de Derecho de Columbia y la Universidad de Nueva York.